Usualmente, el estrés aparece ante situaciones externas como carga de trabajo, problemas interpersonales, tráfico, problemas económicos, entre muchos otros, provocando síntomas tanto emocionales como físicos. Uno de estos síntomas físicos puede ser la caída de cabello.
Este tipo de pérdida de cabello se denomina efluvio telógeno, donde el 70% del cuero cabelludo se cae en grandes cantidades durante los episodios más críticos y estresantes que experimentes.
El estrés y la caída del pelo no tienen porqué ser permanentes, ya que una vez controlando el estrés, es posible frenarlo.
Por suerte, existen diversas alternativas para evitarlo, como rodearte de un ambiente positivo, seguir una dieta equilibrada y usar productos que ayuden a evitar la caída de cabello, tales como:
- Shampoo anticaída barra: Contiene principios activos provenientes de los árboles los cuales tienen propiedades increíbles desinflamantes y calmantes que estimulan la producción de Keratina, ayudando a fortalecer las fibras del cabello evitando así su caída y activando el crecimiento.
- Gomitas Hair vitamins: Formulado con vitaminas esenciales para el cabello como biotina, ácido fólico y vitamina D. Ideal para el crecimiento y fuerza del cabello.