Las grandes marcas a nivel global han dejado de lado el verdadero objetivo por el cual sus empresas fueron creadas, como brindar una correcta alimentación, proporcionar beneficios dermatológicos, suplementar, mantener sanas a las familias, entre otros.
El aumento poblacional y el incremento de la competencia han hecho que los empresarios busquen ahorrar costos y producir de manera masiva para estar siempre disponibles, sin importar el origen y procesos por los cuales pasan sus insumos, los desechos y desperdicios que estos generan, e incluso menos, el efecto que podrían tener tanto en el medio ambiente como en sus consumidores.
Es por lo que queremos que conozcas los efectos que la industria del Cuidado Personal tiene tanto en el medio ambiente, como en tu salud, y así puedas considerar qué alternativas existen hoy en día para tomar decisiones más conscientes:
Más daños que desechos
Desechos innecesarios. – El empaque de los productos de belleza y cosméticos están caracterizados por su creatividad y diseños, donde tener un simple empaque no es suficiente, lo cual lleva a las marcas a utilizar material innecesario generando más residuos, los cuales están generados sin un objetivo real, como materiales de cartón, vidrio, plástico, papel y metal, ¡generando más de 120 billones de unidades cada año!
Exceso de plástico. – ¡Aproximadamente 8 millones de toneladas de plástico entran a los océanos anualmente! Siendo la industria de belleza una de las que más contribuye a la cifra. El grave problema es que el plástico no es biodegradable y toma cientos de años en deshacerse. Además, durante este tiempo pasan por un proceso de degradación desprendiendo microplásticos que afectan la vida marina y por ende a los humanos durante la ingesta de animales, volviéndose todo un ciclo de daño para la vida.
Micro perlas. – El problema del plástico no termina en el empaque, el contenido dentro de los ingredientes utilizados en el mundo del cuidado personal también cuenta con pequeñas partículas de plástico menores a 5 mm, los cuales se utilizan para conseguir ciertas texturas o usos dentro de los productos, causando daños aún mayores que el plástico en los empaques, tanto en la salud de los seres vivos como la contaminación de cuerpos acuíferos.
Contaminación. – Las industrias de la mano de químicos nos han acostumbrado a estándares poco naturales, donde los componentes que nos da la tierra junto con sus virtudes no son suficientes, agregando químicos, metales, perfumes, petróleo, colorantes artificiales y pesticidas, haciéndonos creer que, si un producto no cuenta con ciertos, olores, texturas o características no cumple con la calidad o uso adecuado. Esto nos ha llevado a contaminar el aire, tierra y océanos, destruyendo ecosistemas enteros, aumentando las emisiones de dióxido de carbono, dañando la capa de ozono, entre un listado interminable de efectos secundarios.
Sumado al daño ecológico, estos químicos tienen repercusiones en la salud de los seres humanos, donde además de contaminar y cargar nuestros cuerpos con metales pesados, pesticidas y químicos, han generado un sinfín de enfermedades las cuales se han normalizado, como el cáncer, enfermedades inmunitarias, problemas respiratorios, reacciones alérgicas y enfermedades cutáneas.
Sustentabilidad. – El humano se ha caracterizado por explotar los recursos naturales para su conveniencia inmediata, extrayendo ingredientes o elementos sin un control, dañando el hábitat de miles de especies y generando fuertes daños en los ecosistemas, sin prestar atención a la sustentabilidad relacionada a los productos que generan.
Cruelty free. – Una práctica que ha sido utilizada por muchos años ha sido el testing en animales, el cual está ligado a una alta crueldad, sufrimiento y muerte relacionada a las distintas especies que se utilizan para probar la efectividad, seguridad o usos de los ingredientes. Sin duda, siendo una práctica que cada vez es más penada y mal vista, principalmente en el mundo occidental.
No todo está perdido
Actualmente, ya existe más información disponible para los consumidores, al igual que muchas nuevas opciones para suplir los productos que se normalizaron y utilizamos por años sin saber los daños y consecuencias que causan. Por lo tanto, te dejamos el paso a paso de qué hacer para migrar a marcas mejores para ti y el planeta.
- Investiga. – Averigua cuáles son los ingredientes comunicados en las etiquetas, los cuales, muchas veces, no sabemos qué son con tan sólo leer el nombre. Verificando qué son y qué los componen.
- Edúcate. – Explora por internet para conocer más sobre las empresas que fabrican y venden los productos, verificando las certificaciones que tienen. Te recomendamos entrar a grupos y blogs eco donde podrás verificar el origen, procesos e ingredientes de los productos.
- Elige. – Encuentra marcas que utilicen únicamente el empaque necesario para vender sus productos, los cuales preferentemente sean sustentables o biodegradables.
- Recicla. – Muchas veces las características de los productos o ingredientes no permiten utilizar empaques ecológicos, por lo tanto, te recomendamos contratar una compañía de reciclaje para que de manera periódica recolecte todos tus desechos inorgánicos en la puerta de tu casa, para que puedan reciclarse o reutilizarse.
- Atrévete. – No tengas miedo y atrévete a probar productos y marcas nuevas, las cuales tendrán mejores resultados para tu cuidado personal, mientras amas y cuidas al ambiente y a los demás.
Te compartimos una pequeña lista de marcas que te recomendamos y sabemos que su prioridad es la salud y cuidado de todos: